En medio de este contexto de conflictividad y violencia, en los últimos 35 años ha habido diferentes iniciativas de paz con los grupos guerrilleros y paramilitares. Producto de estos esfuerzos, se lograron procesos de negociación exitosos con distintos grupos armados; así mismo, se han logrado importantes avances en la aplicación de principios y mecanismos propios de la justicia transicional enfocados en la superación de un pasado violento, tales como: 1. La Ley de Justicia y Paz (Ley 975 de 2005) que brindó el marco jurídico para la desmovilización y reinserción de los paramilitares; 2. El Decreto 1290 de 2008 de reparación administrativa a víctimas; 3. La creación y aplicación de la Ley de Víctimas (Ley 1448 de 2011); 4. La creación y funcionamiento del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) dispuesto en Ley de Víctimas: y 5. El Acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera firmado entre el Estado y la guerrilla de las FARC-EP.
Este ha sido un proceso de transición largo, fragmentado y frágil que debe tener como horizonte la reconciliación para una convivencia justa y pacífica, y como fundamento el derecho de la victimas a la verdad, la justicia, la reparación y la no repetición. No obstante, hoy como ayer, el camino para la paz no es fácil ni llano, sino uno con importantes retos, tales como: 1. La polarización social y política que bloquea la percepción que se tiene del otro, el dialogo democrático, la empatía con las víctimas y los consensos necesarios para avanzar con la implementación de los Acuerdos de Paz; 2. El estancamiento de los diálogos de paz entre el gobierno y la guerrilla del ELN y; 3. La continuación de la violencia por parte de grupos armados vinculados a economías ilícitas, que amenaza especialmente la vida de líderes sociales y defensores de derechos humanos. Todo esto en medio de una pandemia que ha transparentado y agravado la desigualdad social en Colombia, y la emergencia de nuevas expresiones de conflictividad social (como el reciente Paro Nacional) que evidencian el descontento de diversos sectores sociales.
Las iglesias y organizaciones basadas en la fe tenemos una oportunidad histórica para contribuir a la construcción de la paz en nuestro país. Desde nuestra espiritualidad, vida comunitaria, liturgia y servicio podemos aportar al reconocimiento de la dignidad y derechos de las víctimas; ayudar a sanar las heridas profundas de la guerra; restaurar el tejido social roto por causa de la violencia y la resolución de las causas estructurales del conflicto. Juntos podemos trabajar para que las próximas generaciones de colombianos experimenten un país donde la misericordia y la verdad se encuentren; la justicia y la paz se besen (Salmo 85:10).
Este Segundo Curso busca ofrecer una visión teológica interdisciplinaria, contextual y propositiva en torno a la reconciliación para una convivencia pacífica y justa en Colombia. A través de la reconocida metodología del Verbo Hecho Carne del CFR, compartiremos un peregrinaje (intelectual, emocional y espiritual) para profundizar en los aspectos relevantes de la Teología de la Reconciliación en dialogo con los saberes y prácticas de cristianos y cristianas comprometidos en el campo de la reconciliación, la transformación social y la construcción de la paz desde sus iglesias locales, organizaciones no gubernamentales, asociaciones de base u otros grupos de la sociedad civil.
Este curso permitirá a cada participante:
- Crecer en el conocimiento de recursos bíblicos y teológicos para articular una visión cristiana de la reconciliación asociada a la paz, la justicia y la fraternidad.
- Recibir el don del lamento reconociendo el sufrimiento generado por décadas de conflictividad armada en Colombia.
- Comprender las conexiones entre liberación, reconciliación y esperanza en la Escritura, e identificar prácticas que reflejen signos de esperanza en Colombia.
- Explorar formas creativas de asumir la fragilidad y la alegría del llamado a ser agentes de esperanza de reconciliación y transformación para la convivencia pacifica y justa en la cotidianidad de la vida y la vocación.
En el desarrollo de esta experiencia formativa nos hemos propuesto construir puentes de conexión que ayuden a repensar la espiritualidad cristiana y la relevancia de la iglesia, así:
- Conectando el saber teológico con otros saberes y prácticas.
- Conectando la espiritualidad con la emoción, el intelecto y la imaginación.
- Conectando personas, iglesias, organizaciones y ministerios de diversos trasfondos cristianos que trabajan en el campo de la transformación social y la construcción de la paz y la reconciliación.
El Segundo Curso está dirigido a:
- Líderes, lideresas y/o miembros activos de iglesias y/o organizaciones cristianas.
- Líderes, lideresas y/o miembros activos de organizaciones sociales y comunitarias.
- Docentes y estudiantes de instituciones de formación teológica y pastoral.
Las personas interesadas además de cumplir con el anterior perfil, deben:
- Dedicar un mínimo de 100 horas lectivas en el desarrollo de la certificación.
- Tener acceso a un equipo de cómputo con conexión a internet estable.
- Estudiar los recursos pedagógicos requeridos y participar activamente en las sesiones.
- Cumplir con las demás actividades requeridas, incluyendo las prácticas de aprendizaje, en cada módulo.
Fecha límite de inscripción:
26 de septiembre de 2021
Costo:
- Inscripciones hasta el 22 agosto: $ 100.000 (COP).
- Inscripciones desde el 23 agosto hasta el 01 de septiembre: $ 150.000 (COP).
- Inscripciones desde el 02 hasta el 19 de septiembre: $ 200.000 (COP).
Los interesados podrán aplicar a un fondo de becas para cubrir el valor parcial o total de la inscripción.
Llenar el Formulario de Inscripción y Aplicación a Becas online.